Para fabricar una buena réplica se requiere una dosis extra de encanto que va mucho más allá de imitar la decoración de su alter ego de carreras; se trata de lograr una configuración verdaderamente deportiva. Pero en algunos casos se va incluso más lejos. El último ejemplo de ello acaba de ser presentado por Triumph. Se llama Daytona Moto2 765 Limited Edition y, como el propio nombre indica, es una edición limitada de una motocicleta de competición apta para circular en carretera abierta.
Alma racing en todo y para todo
Apenas se producirán 1.530 unidades, 765 (cifra no precisamente casual) de las cuales destinadas los mercados americano y canadiense, y otras tantas para el resto del mundo. A diferencia de otras motos que imitan a sus alter ego de carreras, la Triumph va un paso más allá: monta una mecánica similar a la utilizada por todos los participantes de Moto2. No en vano, English Triumph es el proveedor de los bloques de tres cilindros utilizados por los equipos en el certamen.
Sonido de competición
La cilindrada no cambia respecto a las monturas deportivas de Triumph, pero sus valores de par y potencia son los más altos jamás registrados. Llevado de la enunciación a las cifras, hablamos del orden de 130 CV y 80 Nm, con posibilidad de alcanzar las 13.250 rpm. Sin duda se trata de unas prestaciones más que respetables para una motocicleta de cilindrada media, y que se explican a partir del uso de componentes heredados directamente de las mecánicas de competición, como las válvulas de titanio, los pistones reforzados, las bielas modificadas o la consecución de un índice de compresión mejorado. La lista de componentes que marcan la diferencia es larga, e incluye un sistema de escape de titanio que reproduce fielmente el utilizado en Moto2.
El encanto de la fibra de carbono
El elemento más alejado de una réplica de competición es, curiosamente, la apariencia estética, en el sentido de que carece de una pintura que replique colores y logos de un piloto o equipo concreto. Pero no podía haberse hecho de otro modo, dado que se trata de una moto nacida para ser cursomizada. Aun así, se aprecian infinidad de detalles de carreras. El primero es el cuadro de fibra de carbono, que luce los colores típicamente británicos y se inspira en los gráficos de la Union Jack a base de sombras negras y plateadas.
Objetivo: peso pluma
Los carenados y el sistema de escape realizados en materiales hi-tech acentúan la imagen de carreras, aunque su cometido real es rebajar al máximo la masa de la Daytona 765. Esta meta se logra gracias, también, al uso de llantas de cinco radios en aleación de aluminio fundido, la más ligera de su tipo, y un chasis con abundantes componentes de aluminio. Se trata de una estructura de sobras probada: ha sido utilizada en el desarrollo del motor de Moto2 y ha logrado importantes victorias en el TT de la Isla de Man y el campeonato inglés de Superbike.
Detalles específicos de competición
La Daytona Moto2 765 Limited Edition es una moto creada para alimentar a un nicho muy específico del mercado, aquel que busca una potencia excepcional para disfrutarla tanto en circuito como en carretera. Por ello su configuración es extrema, con un único asiento y los mejores componentes disponibles: desde la suspensión de competición Öhlins al sistema de frenos Brembo Stylema, con cinco modos, uno de ellos específicamente para pista, o la caja de cambios con asistencia electrónica Triumph Shift Assist. Los neumáticos Pirelli Diablo Supercorsa SP garantizan, además, la posibilidad de pasar del circuito a la carretera sin problemas.
Sería una pena no usarla
La presentación de esta versión de edición limitada sitúa a Triumph de nuevo en la historia de las motos deportivas, que inició en 1966 cuando la American Buddy Elmore ganó la Daytona 200 remontando desde la 46ª posición de salida. La Moto2 Limited Edition de hoy es la Daytona más exclusiva; para asegurarse de ello, cada unidad se identifica con una numeración específica acompañada del logotipo de Moto2, detalles gravados con láser. En fin, una joya digna de coleccionistas que sería una lástima ver encerrada en un garaje o en una sala de exposiciones.