ALFA es el acrónimo de ‘Anonima Lombarda Fabbrica Automobili' (Fábrica de construcción de automóviles de Lombardía). Nacida en 1910, tuvieron que pasar ocho años para complementar su denominación con el apelativo ‘Romeo', que llegó tras la entrada en el accionariado del ingeniero y emprendedor Nicola Romeo. La firma nace con un marcado carácter milanés, característica que se traslada incluso a su emblema, que reúne los dos escudos heráldicos de la ciudad en la Edad Media: la cruz roja sobre fondo blanco de Giovanni da Rho y la serpiente de la familia Visconti –muy ligada a la historia lombarda– con un estilizado niño en su boca. Hasta 1972 figuraba escrita la palabra “Milano” (Milán), denominación que desapareció con el traslado de la fábrica a Pomigliano d'Arco.
EL MUSEO DE ARESE
Han transcurrido 110 años de su fundación, y la relación entre la marca y sus devotos aficionados, o mejor dicho, entre Alfa Romeo y los apasionados de los coches, se ha convertido en un lazo sólido, inquebrantable y con un marcado sentimiento. Por este motivo, la celebración es, más que un aniversario, una cita con la historia. Se han abierto las puertas del Museo Alfa Romeo en Arese con todas las medidas de seguridad, un edificio que alberga las creaciones más importantes de la historia de la marca y que describe sus diferentes eras y generaciones. Alfa Romeo, que cuenta con un ADN de marcada tendencia emocional, se ha involucrado directamente con el club, los visitantes y los fans, que podrán participar en desfiles por el circuito interno e incluso en flash mobs, siempre con la seguridad como prioridad absoluta. Y para todos aquellos que no puedan acudir a Arese en persona, se ha habilitado una programación especial en directo en los canales oficiales de la marca.
APERTURA ESPECIAL
La firma del biscione abrirá por vez primera su espacio de Colección al público, lo que amplía la zona visitable del Museo y amplifica la experiencia de los visitantes. Esta zona incluye 150 piezas entre coches, motores de avión y náuticos, trofeos y obras de arte. Así que estás ante una ocasión de oro para convertir tu viaje en un auténtico, completo y detallado paseo por la historia. La visita a estas joyas de la historia del motor puede realizarse en espacios de tiempo específicos y siempre con reserva previa en la página web del Museo. La colección completa se divide en 18 áreas temáticas que van de los primeros automóviles de la marca, como el 20/30 ES, a los primeros Fórmulas, incluyendo los F1 y F-Indy. Además, se exponen algunos concept cars históricos, como el Caimano y el Protéo, o prototipos como el Scarabeo, el Sprint 6C y un Giulia que conserva el camuflaje de su fase de pruebas. Pero hay más; encontrarás, entre otros, el RL, el 6C del mítico Vittorio Jano y unidades más recientes tanto de competición como producción. Por último, se muestra una colección de motores, que van desde el 4C 1500 de los años treinta a las de Fórmula 1 actuales. Y como extra adicional, se ha añadido una nueva sección, denominada “Alfa Romeo en uniforme”, en la que se exhiben coches de la policía italiana, los Carabinieri, y que testimonia la cercana relación entre la marca y las fuerzas de seguridad, que siempre han adoptado algunos de los Alfa más significativos.
ALFA Y PIRELLI
Tan especial apertura constituye también una gran ocasión para redescubrir los estrechos lazos que unen a dos marcas que son símbolo de Milán y emblemas del automóvil italiano en el mundo. Pirelli suministró los neumáticos del Alfa Romeo 158 de 1950, unos Stella Bianca para el primer Fórmula 1 en vencer una carrera y el título en la nueva era del campeonato mundial. En 2013, el modelo 4C ofreció un rendimiento extraordinario en el Nürburgring-Nordschleife equipado a unos neumáticos Pirelli P Zero Trofeo R. Similar historia para los P Zero Corsa que convirtieron al Giulia Quadrifoglio en la berlina más veloz en el trazado alemán. Y al año siguiente llegó el turno del Stelvio Quadrifoglio: el mismo –y terrorífico– escenario y unas cubiertas distintas –unas P Zero– para hacerse con el título de SUV más rápido del mundo. Estos son apenas unos cuantos ejemplos de una relación con fuertes raíces, y avalada con numerosos éxitos e historias ahora legendarias.
EN EXCLUSIVA PARA ALFA
Por esta misma razón recién apuntada, Pirelli introdujo en 2014 el marcaje específico “AR” para distinguir a los neumáticos desarrollados a medida para los Alfa Romeo, consecuencia de un trabajo compartido entre ambos fabricantes. Esta es la vía que siguen los modelos Premium y Prestige, que mantiene ocupados a los técnicos de Investigación y Desarrollo de la firma de la P lunga durante hasta tres años por cada uno de los proyectos, incluyendo miles de horas de pruebas indoor y outdoor, la fabricación de docenas de prototipos y unidades de desarrollo, tanto reales como virtuales. Cada modelo de la gama actual de Alfa –además de sus unidades más icónicas de tiempos recientes, caso del 8C Competizione– cuentan con neumáticos Pirelli desarrollados a medida entre los ingenieros de Bicocca y los de Arese. Una norma que se vuelve más interesante en las unidades Quadrifoglio –Giulia y Stelvio–, calzadas desde el primer equipo con cubiertas P Zero. Porque, al final, ambas marcas comparten características comunes, como la devoción a las altas prestaciones con la máxima seguridad.