Este verano irá sobre ruedas. Descubre Europa al volante de una camper con las tres rutas que te proponemos y disfruta de unas vacaciones como nunca antes.
Pon a punto tu camper antes de comenzar el viaje y evita sustos en carretera eligiendo un calzado adecuado como los neumáticos Carrier. Gracias a su control sobre mojado, resistencia al aquaplaning, la seguridad está garantizada.
SACADA DE UN CUENTO DE HADAS: LA SELVA NEGRA
Se encuentra al suroeste de Alemania y parece sacada de un cuento de hadas. La famosa Selva Negra cuenta con 160 kilómetros de profundos bosques de abetos, lagos, embalses y pantanos que podrás recorrer al volante de tu camper.
La mejor forma de descubrir los encantos la Selva Negra es realizar una ruta para la que necesitarás entre 7 y 10 días de viaje si quieres disfrutar de la zona relativa con calma.
Esta ruta comienza en el norte, en Baden-Baden y finaliza en Friburgo de Brisgovia, en el sur. Entre medio recorrerás algunos de los más de 300 pueblos de la zona: Gengenbach, Haslach im Kinzigtal, Triberg, Schiltach o Calw. Pueblos pequeños que invitan a perderse y a fotografiarlos conservándolos para el recuerdo.
Una buena organización es clave para disfrutar del viaje, pero la improvisación, en este caso, debería ser obligatoria. Modifica la ruta a tu antojo para admirar la belleza de la zona y descubre carreteras sacadas de una película como la ruta B500. Esta carretera panorámica serpentea por el denso bosque de la zona y atraviesa los puntos principales de la Selva Negra ofreciéndote unas vistas de escándalo.
Pero no todo va a ser conducir, en este popular destino alemán también hay lugar para la gastronomía. No te quedes sin probar popular tarta Selva Negra o platos como el Schnitzel (un filete empanado con patatas fritas, lechuga y mermelada) o el Käsespätzle (a base de pasta, con salsa de queso y cebolla frita).
BAJO EL SOL DE LA TOSCANA
La Toscana es una región para enamorarse de Italia. Un destino de postal, para conocer poco a poco y disfrutar de cada etapa del trayecto. Viñedos, colinas, pueblos medievales y una gastronomía que te hará desear que el viaje nunca acabe.
Sus icónicos pueblos y ciudades y una naturaleza cautivadora la convierten en un destino perfecto para entusiastas del arte, la naturaleza y el buen comer. Si quieres recorrerla en campervan necesitarás entre 7 y 10 días.
Comienza el roadtrip en la cuna del Renacimiento: Florencia. Recorre sus rincones más pintorescos como la Piazza del Duomo, el Ponte Vecchio o la Piazzale Michelangelo y déjate impresionar por cada detalle.
A 80 km de Florencia encontrarás Arezzo, el siguiente destino. Asentada en un territorio de verdes colinas esta población te hará sentir como si hubieses viajado en el tiempo, ya que conserva arquitectura de la época romana y medieval.
Y siguiendo con la temática medieval en la famosa Lucca podrás recorrer su impresionante muralla renacentista y visitar alguno de sus imprescindibles como la Piazza Napoleone o la Torre del Ore.
Finaliza el roadtrip en Siena, Patrimonio de la Humanidad desde 1995. Historia, arte y arquitectura confluyen en esta ciudad medieval que no te dejará indiferente. Sube la Torre de Manglia para disfrutar de las mejores vistas.
Si dispones de más tiempo, puedes alargar tu viaje en camper y pernoctar en ciudades como Volterra, Monteriggioni, Cortona o Montepulciano. La Toscana tiene mucho que ofrecerte.
BELLA POR NATURALEZA: ESLOVENIA
El 60% de la extensión de Eslovenia es bosque, lo que convierte a este país en el destino perfecto para los amantes de la naturaleza. Recorrerlo en camper es un viaje de descubrimiento.
Pese a ser un país relativamente pequeño, lo ideal es reservar un mínimo de 7 días para recorrer los enclaves más importantes, pero puedes alargar tu roadtrip hasta la quincena.
Si vas a dedicar 7 días a descubrir el país y buscas lugares de una belleza increíble los lagos esmeralda de Bled y Bohinj son una parada imprescindible. El lago de Bled es uno de los lugares más turísticos del país y con solo visitarlo descubrirás el motivo: hipnóticas aguas verdes sobre las que flota una isla con un magnífico castillo.
Si te gusta el senderismo en el Parque del Triglav podrás hacer numerosas rutas y excursiones organizadas en las que descubrir la fauna y flora local, bañarte en serpenteantes y fríos ríos o fotografiar impresionantes cascadas.
Y hablando de cascadas, otro lugar que no debe faltar en tu roadtrip son las gargantas de Vintgar. Un paseo de 1.5 km a pie por pasarelas y puentes sobre el río Radovna. Diferentes saltos de agua y pozas dan paso a la cascada final. Una excursión fácil y agradable, pero bastante turística.
Completa tu viaje visitando Liubliana, Maribor, las cuevas de Skocjan y Postonja y finalízalo con un chapuzón en la costa eslovena (Koper, Izola, Piran…).
