Si eres fan de la gastronomía, estas rutas en coche por España están pensadas para hacerte disfrutar con los cinco sentidos de los sabores del otoño.
En esta época, viajar es un placer: los paisajes se tiñen de colores cálidos, las carreteras no conocen las aglomeraciones y el olor a tierra mojada invita a recorrer nuevos paisajes.
También es en otoño cuando nuestros bosques se llenan de setas y castañas, ingredientes protagonistas de la cocina tradicional de muchas regiones.
Si todo esto te suena bien, sigue leyendo, porque hoy te traemos tres rutas gastronómicas para que disfrutes de los sabores de la temporada mientras recorres espectaculares paisajes.
El otoño en la Sierra de Aracena (Huelva)
Si buscas una ruta que combine paisajes espectaculares y una riqueza gastronómica increíble, esa es sin duda la Sierra de Aracena, en Huelva.
Conducirás por carreteras serpenteantes entre encinas y castaños que te llevarán a pueblos preciosos como Aracena, Alájar y Castaño de Robledo.
En todos ellos podrás degustar los productos locales más populares de esta estación. Las grandes protagonistas son las setas; cuando visites los mercados locales, encontrarás a la venta grandes cestas de níscalos, boletus y demás variedades, ideales para disfrutar con un buen jamón ibérico o prepararlas al ajillo.
Las castañas también son un símbolo de esta zona, así que asegúrate de saborearlas en todas sus formas, desde asadas hasta en cremas dulces para una buena sobremesa.
Completa la experiencia haciendo una excursión por los bosques de la sierra y no te pierdas la Gruta de las Maravillas, una cueva impresionante repleta de estalactitas y estalagmitas.
Recogiendo setas en el Montseny (Cataluña)
Los aficionados a las setas tienen una visita obligada cada otoño al Parque Natural del Montseny. Se encuentra a menos de una hora en coche de Barcelona y es un plan perfecto para un fin de semana.
Durante los meses de octubre y noviembre, el bosque se llena de boletus, trompetas de la muerte y rovellons. Algunas de las zonas más populares para recoger setas son Sant Celoni y Santa Fe del Montseny.
Si lo tuyo no es recogerlas y prefieres simplemente degustarlas, en pueblos como Viladrau o Sant Celoni encontrarás restaurantes que ofrecen las especialidades de la temporada, como la sopa de rovellons o la fricasé de setas con butifarra.
Y para bajar la comida, puedes disfrutar de múltiples rutas de senderismo con un paseo tranquilo rodeado de castañares centenarios.
Experiencia micológica en Cáceres (Extremadura)
Cáceres es un destino estrella para saborear la gastronomía otoñal. Tras las primeras lluvias del otoño, la Sierra de Gata se convierte en un paraíso para la recolección de setas. Entre sus bosques de encinas, castaños y robles encontrarás boletus, amanitas y senderuelas.
Recorre pueblos como San Martín de Trevejo, Gata o Hoyos y disfruta de sus paisajes otoñales. Y cuando te entre el hambre, prepárate para vivir una experiencia gastronómica a la altura degustando las tapas de setas de temporada en los restaurantes de la zona, como los boletus a la plancha o los revueltos de amanitas.
Si además te alojas en alguna casa rural de la zona, la experiencia estará completa. Muchos establecimientos ofrecen visitas guiadas por los bosques para aprender sobre las distintas variedades de setas y disfrutar del entorno.
