“Fangio. El hombre que domaba las máquinas” es un amplio y apasionado repaso a la vida del considerado como mejor piloto de todos los tiempos en forma de documental –producido por la argentina Cinema 7 Film y distribuido por Netflix. El trabajo, muchas veces reivindicado por la familia del corredor de Balcarce, recoge múltiples testimonios de los campeones de ayer y hoy, y los complementa con abundantes imágenes de época y las historias de quienes tuvieron la suerte de conocerlo y trabajar con él.
FANGIO, EN LA MEMORIA DE PIRELLI
El documental arranca en la Fundación Pirelli, sede del Archivo Histórico del Grupo y que recoge numerosos pasajes históricos de este piloto que, quizá más que ningún otro, ha ligado su carrera a la firma de la P lunga. Y no se trata de una simple relación de colaboración “técnica” entre campeón y productor de neumáticos, sino un vínculo que ultrapasaba lo profesional.
La dilatada carrera de Fangio y Pirelli, desarrollada entre 1949 y 1957, y pasando de la Fórmula 1 a la Mille Miglia, está ampliamente documentada en el Archivo Histórico de la Fundación. Son muchas las fotos conservadas, algunas de ellas autografiadas por el astro argentino. De hecho, de Fangio y sus éxitos deportivos se ha hablado ampliamente tanto en la “Rivista Pirelli” como en la publicación interna de Pirelli Argentina, “Páginas”.
DE LAS CARRERAS AL CINTURATO
Fangio y Pirelli tejieron una relación que trascendía la competición. En 1950 el piloto protagonizó algunas escenas de la película “L'ultimo incontro”. Entre las imágenes conservadas en el Archivo se hallan escenas de backstage de la grabación del film, en el que el piloto se interpreta a sí mismo durante la salida del Gran Premio de Italia en un set ambientado en el box de Alfa Romeo-Pirelli en el Autódromo de Monza.
En 1965 Fangio protagonizó una serie de spots publicitarios del modelo Cinturato destinatos al “Carosello” que emitía la RAI (Radiotelevisión italiana). En el spot principal, dirigido por Roberto Gavioli para Gammafilm, el argentino recorre la pista de Monza al volante de un Alfa Romeo Giulia GT. En él recuerda que algún tiempo atrás competía con los neumáticos Stelvio, y reconoce en cambio que el Cinturato es “extraordinario”. La Fundación conserva también el reportaje fotográfico realizado por Ugo Mulas durante la grabación del anuncio. Ese mismo 1965, el diseñador Pino Tovaglia firmó la campaña publicitaria para publicaciones de papel titulada: “Extraordinario”.
Al año siguiente, en 1966, Fangio interpretó una segunda serie de spots, de nuevo bajo la dirección de Gavioli para Gammafilm, sobre el Cinturato. Se trata de cinco filmaciones en las que el piloto recuerda los momentos clave de su carrera deportiva: el Gran Premio de Alemania de 1957, el de Monza en 1953 y 1956, y el de Montecarlo en 1950, además de dos clips históricos dedicados a unas pruebas en Monza con el Alfa 159 que venció el Mundial de F1 en 1951. Parte de esta campaña publicitaria, en la Fangio se interpreta a sí mismo, se ha incluido en el documental de Netflix dedicado al “hombre que domaba las máquinas”.